Debido a la reducción de precios de las tarjetas de memorias en los años recientes, muchas cámaras termográficas actualmente en el mercado podrían utilizar dichas tarjetas para guardar imágenes, video y en algunos casos anotaciones de voz y texto. De manera general lo anterior resulta conveniente, sin embargo, pueden existir algunos potenciales retos debido a que las tarjetas de memoria son más económicas y los usuarios podrían ser un poco más despreocupados con las mismas. Además, son elementos muy pequeños que no deben extraviarse. Como usuario de la termografía, las imágenes capturadas y guardadas durante las inspecciones son críticas por lo cual es preponderante cuidar las tarjetas de memoria.
Las tarjetas de memoria sin importar el tipo podrían fallar o corromperse, lo que podría representar una gran pérdida de tiempo y esfuerzo. Para todos aquellos que utilizan tarjetas externas de memoria en sus cámaras termográficas, que probablemente sean la mayoría, podrían existir ciertos pasos a tomarse para mantener las tarjetas de memoria funcionando eficientemente.
- Mantenga las tarjetas de memoria limpias y si posee tarjetas adicionales o si no las está utilizando dentro del equipo guárdelas en el contenedor plástico que muchas veces traen al comprarlas. Esto en lugar de tenerlas sueltas en el estuche de herramientas, gavetas o aún peor en la bolsa.
- Nunca inserte o remueva la tarjeta de memoria mientras la cámara termográfica se está encendiendo, apagando o mientras se guarda la imagen.
- Luego de descargar o transferir las imágenes al computador, si se está seguro de que ya se copió las imágenes de manera adecuada, podría proceder a borrar las imágenes de la tarjeta de memoria.
- Se sugiere mantener un nivel adecuado de carga en las baterías de la cámara termográfica al momento de trabajar, debido a que si se guardan imágenes con nivel muy bajo de carga podría causar que la información se corrompa.
- Siempre lea la documentación del fabricante antes de formatear una memoria pues el proceso podría variar de fabricante a fabricante, o puede variar dependiendo el dispositivo donde se utiliza.
Antes de realizar cualquier tipo de inspección debemos asegurarnos que se cuenta con suficiente espacio en la memoria. Con los costos actuales de las tarjetas de memoria no hay razón por la cual no se podría contar con múltiples tarjetas de memoria. Durante la inspección, se podría revisar periódicamente que las imágenes están siendo guardadas de manera adecuada, pues todos podríamos haber escuchado alguna historia acerca de alguna persona que tuvo que realizar una inspección dos veces ya que de manera mágica las imágenes desaparecieron la primera vez que fueron tomadas. Que no nos pase lo mismo.
Si se está grabando video o realizando anotaciones de voz o texto, podría ser conveniente familiarizarse con la cantidad de espacio que esto ocupa en la memoria. El video podría ocupar mucho espacio en la tarjeta de memoria muy rápidamente, por lo que podría ser recomendable realizar prácticas con la cámara antes de la inspección real para tener una mejor idea del espacio de memoria requerido.
La mejor imagen infrarroja del mundo no tendría ningún valor si no es guardada o grabada. Las imágenes almacenadas en la memoria son la parte más crítica del proceso post-inspección del reporte, sin estas imágenes podría resultar casi imposible ilustrar la severidad y ubicación de los problemas encontrados y reportarlos a la persona adecuada. Las tarjetas de memoria podrían ser baratas, pero las imágenes almacenadas dentro de ellas no lo son. Debemos cuidar de las memorias para que ellas realicen su función. Por último, debemos recordar que podría ser necesario contar con un adaptador para poder insertar la memoria en el computador.